Páginas

lunes, mayo 16, 2016

Atardecer


Ese maravilloso entre luces ocurre cuando el Universo conecta las luces de bajo consumo para ahorrar. Y ahí empieza la magia. Con el atardecer viene la paz. No la Paz Vega, no, malpensados. Esa mujer, y a esas horas, anda con el carnicero (que anda eligiendo el hueso añejo para el puchero quiero decir). El encantamiento del anochecer tiene mil razones: para unos significa el final de la jornada laboral, para otros el preámbulo de una buena sentada en el sofá-relax. Hay de todo, desde los más “efervescentes” que piensan en la gimnasia del amor antes de dormir, a los ahorradores que sólo suspiran por desiluminar la casa entera, antes de que Endesa se la embargue.
Yo, personalmente, he aprendido a gozarlos, sin más. 

Escrito por Manolo Martínez

5 comentarios:

  1. Para mi el mejor significado de este atardecer es que puede ser lo que uno quiera, para eso está la imaginación que no tiene límites.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  2. Hermoso atardecer e inmejorablemente descrito. Una de las cosas que más me gusta a mí de un atardecer es que tintinea la campanilla de... "en unas horas descansas"; y la otra es la de pensar qué después llegará la mágica noche, y si nada lo impide, un nuevo amanecer :)

    ResponderEliminar
  3. Comparto tu lectura María Dolores, así es, la imaginación al poder

    ResponderEliminar
  4. Gracias Margari por tu comentario, un beso

    ResponderEliminar