CARPE DIEM



Dentro de veinte años, lamentarás más las cosas que no hiciste, que las que sí hiciste. Así que, suelta amarras y abandona el puerto seguro. Atrapa los vientos en tus velas. Explora. Sueña. Descubre.


domingo, junio 25, 2023

LA BODA

Era mu chica, mu chica, mu chica…, cuando se venía a mi casa a hacer los deberes, a dormir la siesta, a comer, a estar con nosotros. Irene era una más de la familia, un regalo inesperado que nos trajo una cigüeña en un vuelo corto desde la Tabernilla de Aroca.

Ayer, veintitantos veranos después, nos ha invitado a su boda con Rafael, por cierto, ¡qué suerte has tenido Rafael!, te llevas lo mejorcito de la calle San Francisco.

 
En mitad del convite, por cierto, ¡pedazo de convite!, aparece la novia, tan guapa por dentro como por fuera, y le deja a caer a su “Yiyi”, mi madre y la segunda suya, con permiso de la primera, Mari-Carmen Valverde, por cierto, ¡qué guapísima que iba la madre que la parió!, decía, que me voy por las ramas, que le dejó caer a mi madre, su “Yiyi”, un ramo de flores entre sus manos.

Cada flor de aquel ramo escondía un puñado de risas, unas cuánta lágrimas, algunas confidencias, y la infancia de esta bióloga que nació para cuidar a todo el que esté cerca de ella: su Juani, su Elena, su Rafaé…

Qué boda más hermosa te inventaste ayer, Irene, digna de ti. Todos estuvimos en ella a gusto, porque tú haces que la gente esté cómoda  a tu lado.

Ayer me vine sin decirte adiós, no por despiste, sino porque tenía que escribirte estas cuatro letras de agradecimiento, por hacer que todos nos sintiésemos “guapos” en tu boda, todos, hasta esos bichos llenos de luces que bailaron entre nosotros.

No te voy a desear que seas muy feliz, porque eso ya es un hecho, voy a ser egoísta, y te voy a desear que vivas muchos años para que sigas regándonos a todos los que pasamos por tu lado, de buen karma.

Gracias Irene, eres una buena persona, y en estos tiempos que corren, un lujo al alcance de muy pocos.

Vaya Rafaé lo que te llevas…que la disfrutes. 


                                   A la boda no le faltó un perejil, ni el susto final

1 comentario:

Anónimo dijo...

No lo podías haber descrito mejor!!!🥰

quizas te interese

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...