Un hombre, que había abandonado a su hijo, y a su mujer, hacía veinte años, sin dar más señales de vida, se puso en contacto con su hijo a través de una carta. En ella le confesaba sentirse culpable, y le pedía perdón por haberle dejado desprotegido, sin medios para tener una infancia y adolescencia tranquilas, afectiva y económicamente.
Tras las disculpas, le contaba que había tenido suerte en la vida, que le había ido tan bien que había llegado a ser el gerente general de la fábrica de sombreros Borsalino en Alessandreia, Italia), y para demostrarle que no se había olvidado de él, le escribía:
— Dentro del sobre te mando una cuerda para que te midas la cabeza y me lo devuelvas porque quiero regalarte un sombrero borsalino a tu medida.
Esta historia es real, es la historia de Lucas, un amigo universitario de Julio Cortázar.
Manolo Martínez
Hazte seguidor, aquí abajo, de mi Tertulia "COMER, BEBER y HABLAR"
https://www.facebook.com/Comer-Beber-y-Hablar-1630331003941651
No hay comentarios:
Publicar un comentario