Como podemos disfrutar en estas maravillosas fotografías de José María Montero, volvemos a recuperar nuestra Plaza de Arriba. Para ello se ha trabajado desde antes que amaneciera hasta que el sol estaba en todo lo alto, y todo para volver a tenerla en el mejor momento posible, a orillas de la Novena, cuando cada septiembre los carmonenses acudimos a ella con la misma querencia que los pollitos buscan a la gallina para cobijarse.
Y este año más si cabe, porque se ha puesto la plaza más guapa que nunca.
Se le ha hecho un vestido nuevo para estrenarlo en sus fiestas, como hacían las mocitas de antes. Y se ha quitado los tacones, para que los abuelos, y los niños, puedan entrar en ella sin tropezarse.
Todo vuelve a estar en su sitio: la gente le canta la Salve a su Virgen de Gracia y luego se compra el moñito antes de volver a esa playa única que tiene Carmona, una playa redonda y sin arena, dónde pasean nuestros mayores y juegan nuestros niños.
Esa playa en la que Carmona agradece a la vida estar viva de la mejor forma posible, mientras “Come, bebe y habla” a orillas del Goya, Antonio, Casa Paco, Bodega José María, Mingalario, San Fernando, la Chicotá o el Tabanco.
Durante nueve lunas la plaza nos abre sus alas llenas de bombillas amarillas, para que nos reencontremos con los amigos, mientras hilvanamos, con cuidado, las vacaciones con la vuelta al trabajo, no vaya a ser que se nos descosan las venturas por tan poca cosa.
Seamos felices en el mejor pueblo del mundo, Carmona.
1 comentario:
Mi amigo fue un honor para mí me pidieras poder utilizar algunas fotos de la plaza que con tanto cariño he realizado desde su inicio. Ha sido como seguir un embarazo hasta que cobrara de nuevo vida nuestra Plaza de Arriba realizando ayer las últimas fotos con la plaza “moja”como siempre le ha gustado a nuestro amigo José María Cabeza ayer me lo compartía .
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